domingo, 22 de mayo de 2011

Alvy, Nacho y Rubin

Con ellos inauguro oficialmente este espacio. Y lo inauguro porque ya no puedo no compartir lo que me pasa con algunos artistas. Porque me hierve el agua adentro y vos te mereces saber que existen. Así que destapo la olla, le echo sal y pimienta y comparto mis exageradas pastas con vos.



Ellos interpretan a Los Campos Magnéticos. The Magnetic Fields. Una banda que jamás conocí. Hasta hace dos semanas. Y primero me frustré, porque cuando descubro que hay cosas que antes no conocía, y que podrían gustarme mucho, pienso que debe haber demasiadas más ahí dando vueltas por el mundo, y que no me va a alcanzar la vida para llegar a todas y tengo el pensamiento fatalista de que voy a morir siendo una mediocre a la que le quedó mucho por conocer.

Pero después me calmo y pienso "bueno, por lo menos llegué a esto". Conocí a The Magnetic Fields, conocí a Alvy, a Nacho, y a Rubin. Y así conocí a Alvy Singer, y a Rubin y los Subtitulados. Develando mi inevitable condición de ser un poco normal, Onda Vaga (Nacho) ya conocía. Son populares.

En fin. Ellos.

Hace dos semanas fui invitada a la presentación de La Editorial Común por Ricardo Siri (Liniers), en el auditorio del Malba. Cuando vi guitarra y banjo sobre el escenario pensé que iba a tocar Kevin Johansen, para no perder la costumbre de su dupla con Liniers. Aunque los cajones peruanos y el chelo (o contrabajo, nunca los sé diferenciar a simple vista) me desconcertaron un poco. Y mi desconcierto se transformó en amorosa novedad.

Hay muchas reseñas y opiniones ya escritas sobre Alvy, Nacho y Rubin. Podés leerlas en todos lados. Y no por desmerecer, pero todas los halagan de la misma forma. Así que no voy a caer en las apreciaciones técnicas y musicales, si no en las emocionales. El resto de la experiencia lo dejo a la merced de tu curiosidad.

Alvy Nacho y Rubin me generaron una admiración digna de enojo narcisista (por no ser yo capaz de hacer algo tan, tan genial). Y cuando me pasa eso me doy cuenta de que algo me conmovió. La experiencia es difícil de describir. Pero sonreí todo el recital. Me reí por momentos. Y casi lloré de satisfacción. Y obvio, me compré el disco después del show. Y los busqué en FB, Google, Youtube y demás espacios virtuales. Y ahora espero ansiosa un recital para ir a verlos otra vez, ya conociendo y tarareando todos los temas (disimuladamente, para parecer re-cool y no fan de Luis Miguel).

Juro que traté, pero no pude parar de escuchar su disco en estas dos semanas. En cinco días me sabía todas las canciones de memoria. Y cada primer acorde de cada tema me genera adrenalina por la canción que empieza. Bésame con ganas es el nuevo ringtone de mi despertador. Y sí. Así de obsesiva me puedo poner cuando algo me genera tal fascinación. Sobre todo, siendo cantante, el rubro musical me afecta gravemente la psiquis. Ya se me va a pasar, ya va a madurar mi relación con el arte. Aunque... ojalá no.

Este disco que tengo es el Vol.2, encontré en el Vol.1 en Bandcamp, y lo comparto:

http://alvynachorubin.bandcamp.com/album/interpretan-a-los-campos-magn-ticos

Creo que El Galan de la Paternal  les quedó hasta más linda y prolija que al propio Stephin Merritt.

También creo que en algún momento voy a lograr traducir y adaptar Busby Berkeley Dreams y un día la voy a cantar con ellos. Sin ofender a Eugenia Brusa, la maravillosa voz que los acompaña.

Muchas gracias Alvy, Nacho y Rubin. Si me lo permiten, son mis nuevos amigos imaginarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario